Sally Webster Inn Rockport

Reseña de un crítico de hotel

Recientemente tuve la suerte de pasar la Navidad en el Sally Webster Inn, y mi experiencia fue sencillamente memorable. El encanto histórico de esta casa convertida del siglo XIX me hizo sentir como si hubiese viajado en el tiempo, con sus chimeneas originales y vigas de madera que añaden un carácter acogedor. La habitación Sadie the Goat era igual de hermosa que las fotos, con una cama increíblemente cómoda que prometía noches reparadoras. Despertar cada mañana con el aroma de croissants frescos y scones recién horneados fue un verdadero placer, y debo decir que el granola que ofrecieron en el desayuno es, sin lugar a dudas, el mejor que he probado. Marshall, nuestro anfitrión, fue extraordinariamente atento, haciendo que nos sintiéramos como en casa, a pesar de la discreción del servicio. Además de su comodidad, la ubicación del hotel es ideal, ya que permite explorar encantadoras playas y boutiques locales a pie. El Sally Webster Inn es, sin duda, un refugio perfecto para quienes buscan una escapada relajante en la costa de Nueva Inglaterra. Un lugar donde el tiempo parece detenerse, ideal para disfrutar de buenos momentos con amigos o en pareja. ¡Definitivamente regresaría!